“La reconquista de los valores esenciales”

 

A lo mejor más de uno de los que está leyendo este artículo ha pensado alguna vez reducir la marcha de su vida ya sea trabajando menos horas, viviendo cerca al trabajo o en el campo, buscando una nueva vocación lejos del músculo corporativo. Y es que entre papeles, tráfico, reuniones y filas… el día a día se vuelve tedioso.

 

De hecho cada vez más personas buscan un cambio en su vida y tiempo para compartir en familia, comer saludable, mejorar sus hábitos diarios dirigiéndolos al buen vivir y por eso conceptos como Decrecimiento, Sostenibilidad y downshifting nacen y se difunden.

 

Pasamos casi 2 años esperando turno en la fila, 500 días en rellenar formularios, por no hablar de los casi 10 años que estamos ocupados en trabajar, lo que supone aproximadamente una séptima parte de nuestra vida consagrada a la jornada laboral.

 

Y entre cálculo y cálculo personas como John J. Drake empezaron a popularizar el movimiento Downshifting con su best-seller internacional “Vivir más, trabajar menos” y a cuestionar el condicionamiento socio-comercial para iniciar un cambio en su estilo de vida.

 

El movimiento Downshifting surgió a finales de los años ochenta en Estados unidos y proviene de los altos ejecutivos llamados “yuppies” que en español significa Joven Profesional Urbano.

 

Resulta que estos jóvenes empresarios se dieron cuenta que aunque ganaban mucho dinero trabajaban mucho por lo que su vida personal siempre estaba en segundo plano. Más adelante en otras ciudades de E.E.U.U personas, no siempre empresarios exitosos, empezaron a tomar conciencia del valor del tiempo y de la forma de invertirlo en su vida.

 

Lo cierto es que más que conocer el término que le han asignado a esta forma de vivir, este movimiento se había asumido y predicado desde la antigua Grecia y se hace necesario de nuevo en nuestros tiempos haciendo unas pequeñas adaptaciones.  Por lo que hoy por hoy no es necesario prescindir de las comodidades y la tecnología, por el contrario, este movimiento busca un equilibrio en la balanza, a un lado está lo que tenemos y al otro el tiempo que disfrutamos de nuestra vida.

 

Como en todo movimiento, el downshifting también tiene una serie de acciones que especifican cómo vivir con menos dinero, de hecho son como 101, pero aquí solo nombraremos algunos:

    • Cancelar todas las tarjetas de crédito menos una, reservándola para las emergencias
    • Hacer por uno mismo las reparaciones del hogar
    • Usar el transporte público o compartir el vehículo con los compañeros de trabajo
    • Vivir lo más cerca del trabajo, de forma que se pueda comer en casa e ir y venir andando
    • En general renunciar a gastos superfluos.

En general, llevar una vida simple, en la que el dinero no es la motivación de la vida y descubriendo alternativas de vida que seguramente nos darán más satisfacción.

Fuentes:

El Ciudadano
El Blog Alternativo
Expansión
Slow Movement

Video | 5 discursos sobre el medio ambiente breves y muy estremecedores
3 proyectos de transporte líderes en sostenibilidad
Categorías: Sostenibilidad.